Tiene que pasar que cuando mi marido se va de viaje, me enfermo.
Se fue de la casa a las 7 rumbo al aeropuerto, me volví a meter a la cama para dormir un rato mas y me desperté con un dolor horrible pero perfectamente reconocible: calculos renales.
Los tengo desde hace unos 5 años y en este año ya van dos veces que tengo los colicos. Esta fue la primera vez en Noruega. Ni siquiera sabia el numero de un taxi para que me lleven al hospital!! y a esa hora todos mis amigos estaban durmiendo y nadie contestó el celular!
Afortunadamente mi vecina estaba despierta (tocando guitarra) y ella me ayudó a llamar el taxi y me embarco al hospital. La tuve que convencer para que no se meta conmigo al taxi. Re buena onda la chica.
Ya estando en el hospital con el dolor que no me dejaba ni caminar, pedia a gritos un analgesico. Pues estaban mas preocupados en si era alergica o no, y se demoraron muchisimo. Igual cuando siento mucho dolor las venas se vuelven finitas y es recontra dificil inyectar. Me tuvieron que poner calmantes tambien porque hiperventilé y no podía ni mover los dedos. Ni es noruego podia hablar :(
Volvía a casa con pastillas, por ahora van funcionando bien pero le tengo miedo a la noche.
Igual tengo todo a mano para correr al hospital otra vez.
Mi marido esta en Oslo trabajando y todavia no le he contado nada. No quiero preocuparlo porque se volvería abandonando todo y realmente no hay mucho que el pueda hacer volviendo.
Igual, sería mejor que estuviera aqui no? No importa, vuelve pronto!
30 sept 2008
Maldito Murphy
28 sept 2008
Aprendiendo
Es gracioso encontrar gente que acaba de llegar a Noruega….y que me piden información a mi!
Ayer estábamos en una pre-fiesta en la casa de una amiga noruega y llegaron varios chicos italianos, franceses, alemanes. Toditos recién llegados a Trondheim y con toda la curiosidad del mundo me preguntaban que onda con la ciudad, si es fácil acostumbrarse a todo, si el invierno es muy frio, si nieva mucho, y yo me podía ver ahí contestando las preguntas, tratando de no asustarlos y al mismo tiempo dándome cuenta que ya tengo mas de una año viviendo por aquí y que hay cosas a las que pensé no acostumbrarme jamás y ahora son parte de mi día.
He aprendido a apreciar el pan. En Perú tenemos variedades de pan, pero son de pan blanco y las variedades son de forma y no de contenido. El pan negro es de cereales y es el menos consumido. Aquí voy al súper y me quedo mirando los panes (todos son negros) y elijo cual quiero para ese par de días que dura. Un día puede ser pan de yogurt, otro de semillas de girasol, otro con centeno, otro de trigo molido, y lo increíble es que mientras los miro mentalmente los puedo saborear y se cual me gusta más ese día.
Aprendí también a confiar en los termómetros que tenemos pegados al exterior de las ventanas. Cuando tengo que salir, lo primero que hago es mirar la temperatura, luego después de eso decido que me tengo que poner. Lo mismo pasa si llueve, tengo que elegir si necesito el abrigo plástico (si llueve mucho), el impermeable chic que me traje de Buenos Aires (si no llueve tanto) o el pantalón y chaqueta de lluvia (si tengo que montar en bici). Con los zapatos es igual, para mucho frío, poco frío, si llueve, si nieva, si hay viento, si voy a estar mucho en la calle o si voy a estar in doors.
Mención aparte merecen mis clavitos. Aquí los viejos usan unos zapatos que vienen con clavitos en la parte de la suela con el propósito de no resbalarse con el hielo. Los clavitos se incrustan en el hielo y así no te caes. Debo corregir: los usan los viejos y los recién llegados como yo que no aprendemos a caminar sobre hielo. Es algo medio vergonzoso, pero lo prefiero desde que baje arrodillada 1 cuadra entera porque no podía lograr sostenerme en pie (vivo sobre un cerrito y para ir al centro hay pendiente de 3 cuadras).
Me acostumbre a pagar 30 koronas (6 dolares) por un mango y que me parezca barato. A comer rømme (leche cortada, no yogurt), salmón, queso dulce, reno, ballena y carne molida.
Aprendí a asumir que si hay sol tenemos que salir a pasear porque no hay sol todos los días y que los paseos son siempre al bosque y que ir al shopping no se considera paseo.
Aprendí también a que si te chocas con alguien que hable español no significa que te van a hablar al toque y que seremos amigas para siempre.
Igual hay muchas cosas a las que todavía no me acostumbro.
20 sept 2008
Cosas que no entiendo
Me intriga la gente que no toma. No es que no me guste que no tomen, eso lo respeto, pero no entiendo como te puedes declarar no bebedora de ninguna clase de alcohol.
Mi mejor amiga no toma nada (yo me las he tomado todas por ella!). Cuando la conocí me sorprendió que no tomara, pero imaginé que se refería a la cerveza. El hecho es que no toma nada que contenga alcohol, pero por mas dulce que sea. Yo entiendo que no te guste la cerveza, el gusto viene después de unas cuantas y la primera vez no es la mas placentera. Pero asi nomás, decirle no a lo demás, que tal un daiquiri, un pisco sour, una algarrobina, un vinito chardonay, nada????
Aquí tengo otra amiga que tampoco toma, osea son varias! Y yo sigo sin entender.
17 sept 2008
Dos muertes
Hace unos 9 meses murió el papá de una amiga mía. En realidad es mas amiga de mi hermana menor, pero nos conocemos desde niñas, de la época del colegio porque ambas vivíamos en el mismo barrio y compartíamos la movilidad que nos llevaba a casa. También conocemos a su familia y mis papás siempre se llevaron bien con sus padres.
La noticia me llegó estando aquí en Noruega, así que no pude estar allí para consolarla, ni para escuchar la increíble historia de la muerte de su padre:
Pepe era un hombre de familia, bien parecido, con dos hijos jóvenes, una esposa amorosa a la que conoció de adolescente, con muchos, muchísimos amigos.
Un día viernes en la tarde, estaba toda la familia conversando luego de que habían vuelto de sus trabajos, y luego cada quien se fue a hacer sus cosas. Pepe no se presentó a cenar, pero no había ninguna sorpresa pues a veces faltaba a la cena porque estaba en la casa de algún familiar o amigo. Al día siguiente, no estaba para desayunar, asi que fueron a ver el coche de Pepe, pero encontraron que estaba parqueado en el garaje de la casa, entonces imaginaron que se había quedado a dormir en lo de alguien.
El día sábado pasó y el domingo Pepe no estaba para desayunar tampoco. Comenzaron las dudas, pero dijeron nada malo puede pasar porque se ha ido sin el auto, y bueno, a veces se demora porque se va al barrio de la niñez y ahí se pone a tomar con los amigos y se queda el fin de semana. Claro que la esposa pensaba regañarlo cuando llegara.
Pasó el domingo y llegó el lunes. Pepe no apareció. El lunes temprano la mamá le dice al hermano de mi amiga: llama a la oficina de tu papá, tengo que hablar con él urgente (todos imaginaban que estaría en su oficina pues Pepe a pesar de darse la pachanga el fin de semana, siempre respetaba su trabajo). De la oficina le dicen que Pepe no ha llegado y que es muy extraño porque esa mañana había una reunión muy importante. Ahora si, completamente preocupados deciden averiguar donde esta Pepe. El hermano de mi amiga sube a la oficina que el papá tenía en casa para sacar la agenda y llamar a todos sus amigos. Pero cuando abre la puerta, ve a su papá, sentado en el sillón, frente a su escritorio, con los ojos cerrados. Pepe falleció el viernes en la tarde y nadie se había dado cuenta.
La muerte nos sorprende muchas veces, pero algunas otras nos da tiempo para prepararnos:
Tengo un tío abuelo que tiene la misma edad de mi mamá. Es el hermano menor de mi abuela materna y siempre ha sido un hombre muy bueno. Se casó con una mujer gorda y, a pesar de que sobran las gordas en mi familia, siempre fue la más gorda y nadie se lo dejo olvidar. No fue mi tía preferida ni nada de eso, pero siempre me cayó bien.
Hace más o menos 5 meses, mi mamá me llama a casa y me cuenta que la tía había fallecido. Una sorpresa para toda la familia, falleció de cancer y nadie sabía que estaba enferma. En el momento de arreglar todo lo del velorio mi tío se entera que ella había dejado un seguro de vida por una suma de dinero realmente considerable.
Además tenía préstamos en el banco que también estaban asegurados en caso de muerte y entonces todas las deudas estaban pagas. Además mi tía había sacado 3 tarjetas de crédito que también tenían seguros de vida y recibieron dinero por eso.
Hace 3 meses habían decidido comprar un departamento (ellos vivían en una casa en las afueras de Lima, que en algún momento fue linda, pero ahora no) y ella había contratado un seguro también en caso de muerte del propietario, así que sólo pagaron las primeras tres cuotas del banco, unos 1200 dólares y el resto se lo condonaron.
Ella hasta se había dado tiempo para comprar el nicho en el cementerio, el ataúd, e inclusive, la ropa que iba a usar ella, el marido y los dos hijos para el sepelio.
Todos nos damos cuenta ahora que ella lo sabía todo (era enfermera) y que decidió no contarle nada a nadie y dejar todo arreglado para que su marido y sus hijos no sufrieran por su muerte. Se inyecto calmantes fuertísimos y siguió trabajando y haciendo sus cosas normalmente hasta que no pudo mas, y al día siguiente murió.
3 sept 2008
Disparate
Estaba inspirada y pensé en algo interesante para compartir. Pero antes de empezar a escribir me fui a recoger la ropa que habia puesto en la lavadora. Como puse toallas ajusté la temperatura a 90 grados centigrados, además de las toallas puse algunas medias y bombachas.
Cuando estaba colgando la ropa me di cuenta que había una bombacha que no conocía!! Que pasó? que simplemente las bombachas que no son de 100% algodon, no se pueden lavar a 90 grados. La bombacha extraña es MI bombacha, pero sin dibujitos, con las blondas decoloradas y con un color medio grisaseo (originalmente era blanca con dibujos azules). Además, otra de las bombachas que era de encaje marrón, ahora es medio violeta.
Lo peor es que me siento mal! Con lo dificil que es conseguir ropa interior linda y barata por aqui, sobre todo para el tamaño de tremendo trasero!! Y además, con los problemas que tiene el mundo, como puedo estar triste por dos bombachas!!!!!!!!!!!!!