Si, aunque la canción es el símbolo de la decadencia noruega, se convirtió en un himno para mi durante mis vacaciones en España (o al menos una parte de ellas).
Recibido el año nuevo a temperaturas de -21°, me dispuse presurosa a alistar mi maleta y decirle adiós a mi gente. Me fui de vacaciones a Madrid. Cómo, obviamente, a mi no me sobra la plata, compré un pasaje barato pero confiable. Mi plan era Oslo-Alicante (barato en avión), pasar unos días allá y luego viajar a Madrid. Para el regreso, tomar el tren desde Madrid hasta Alicante y luego avión de regreso.
Elegí Alicante como destino porque una compañía aérea noruega tiene como destino ciudades costeras de España a precios muy cómodos y todo se debe a que muchos pensionistas noruegos pasan el invierno en España, donde viven en una especie de colonias cerradas y hasta pueden comprar en el supermercado productos noruegos exclusivamente traídos para ellos. Todo esto me lo habían contado los noruegos por aquí, pero al subir al avión en Oslo recién me di cuenta que no estaban exagerando. Con decirles que yo era la única persona no noruega y además menor de 60 años en todo el avión! y el avión estaba lleno! Claro, todos regresaban a sus casitas de playa españolas luego de haber pasado fiestas con sus familias!
Otra cosa que me dijeron los noruegos por aqué es que las ciudades españolas frecuentadas por los pensionistas noruegos eran muy feas, aburridas y solo los viejos las encontraban adecuadas para vivir allí. Yo debo tener alma de vieja entonces, porque a mi me ENCANTO Alicante!
Cuando llegué hacían 15° SOBRE CERO! Después de instalarme en el hotel salí a pasear y el pequeño centro me encantó, lleno de tiendas y restaurantes. A la mañana siguiente me di un paseo por la playa que me hizo sentir feliz, había mucha gente en el malecón, vendedores, niños jugando y metidos en el mar hasta las rodillas. También había gente pescando (que es un gran plus para mi) y, en conclusión, Alicante se lleva el primer puesto en ciudades españolas (en mi ranking personal jajaja).
Ya en Madrid (donde hacía un frío de m... porque hasta nevada hubo) conversando con algunos españoles me decían que Alicante era feo, pero sólo habían estado allí en verano, cuando esta a reventar de turistas y las temperaturas llegan a los 45°. Obvio que así no se pasan buenas vacaciones.
Bueno, ahora tengo un plan, llevar a mi maridito a vacacionar por alla antes del verano. Uhmmm, lo malo es que el creció con el cuento que Alicante es horrible y va a ser difícil convencerlo.....
Ahh, y saben lo que me traje de recuerdo? Pues, 23 kilos de lomo ibérico, queso manchego, vino riojano, chorizo con bellota, cayos, fideua, paté, aceitunas negras..............